En la cocina se utilizan por igual la semillas y las hojas.
Las semillas tienen un fuerte sabor aromático y se las considera especias, las hojas son de sabor más suave, parecido al perejil y sirven para adornar curries y otros platos orientales, para mezclar con quesos blandos o para aromatizar platos de carne.
El hinojo tiene hojas como plumas, al igual que el eneldo, pero crece más alto.
Su agradable saqbor anisado y ligeramente ahumado contrarresta la grasa del pescado azul.También va con las ensaladas y los tallos secos con las sopas de pescado. Las semillas y los tallos secos machacados acompañan bien a las patatas asadas.
Es una variedad silvestre de la mejorana y tiene el mismo sabor, pero más fuerte.
Los quisos sazonados con esta hierba quedan muy ricos y aromáticos.Se pone salpicado sobre el cerdo, el jamón o el pescado antes de asarlo a la parrilla, en cuyo caso es mejor seco.
Las hojas de orégano frescas y picadaas van muy bien con ensaladas de tomate y de repollo crudo.
Es una hierba deliciosa de sabor penetrante que recuerda ligeramente al pino, pero es fuerte y hay que ponerla con medida.
Va muy bien con los guisos y sopas de cordero y de pollo.
También se puede salpicar por encima de los platos de pasta, de las ensaladas de tomate, de la coliflor y de las alubias.
Hay dos variedades, la de verano o de huerta y la de invierno o silvestre.
Las dos tienen un sabor fuerte y ligeramente picante, aunque la de verano es más suave.
Se le llama la especia de las legumbres, porque va bien con las alubias y otras leguminosas, además de ser el aromatizante perfecto de la trucha.
Se puede aderezar con él la ensalada de remolacha y también va bien con tortillas y huevos rellenos.